[Oneshot] How to be TORN (Ryokura)

 Pensando si teñirme de un color verde manzana o un amarillo patito... 【・ヘ・?】
 LuisMi xD - Suave (la radio~)
 En el comedor~


Ciaossu~!!
Mientras Deviantart sube (creo) los wallpapers que me llevó todo el día cambiar de tamaño @@ les dejo este oneshot que hace un montón de tiempo quise hacer, pero nunca supe muy bien cómo seguirlo. Jeje~
La idea es pasarlo al inglés, pero... Se me está complicando bastante xD jajajaja~

Enjoy~!

Título: How to be TORN.
Fandom: Johnnys.
Pairing: Ryokura [Okura Tadayoshi x Nishikido Ryo]
Formato: Oneshot.
Género: Smut.
Rating: PG-13
Resumen: Ryo y Tadayoshi son los únicos que no tienen una canción para su próximo single, Musekinin Hero. Una noche de copas ayudará a ambos a llegar a la creación de su famosa canción, torn.

How to be TORN

Dos personas cenaban tranquilamente en un pequeño restorán. Ese era el lugar donde menos gente había y donde serían menos reconocidos. Uno de ellos empezó a cantar junto con la canción que sonó en la radio. Fue mirado de reojo por su compañero, quien sonrió tiernamente. Él también conocía la canción, haber pasado casi un mes aprendiéndose la coreografía, no fue por nada.

– “Hoshi mono wa… desire… ¿Por qué sólo nosotros no tenemos ni letra ni música y ni siquiera un maldito nombre?”, suspiró, hundiendo sus pesares en la bebida. “Lo mejor hubiera sido que me emparejaran con Sho-chan… o con Subaru-kun… Ellos sí que saben componer… No como…” Volvió su vista a su compañero. La canción había terminado y se divertía comiendo. Siempre se divertía comiendo, del mismo modo en que él se divertía bebiendo o andando con alguna chica bonita. Suspiró, de nuevo, esta vez más lastimosamente. “Ni siquiera puedo acostarme con alguna hasta que terminemos la dichosa canción…”

– ¿Sucede algo? – Le preguntó Tadayoshi, mirándolo por primera vez, dejando de un lado su comida, milagrosamente. Claro, después de todo, había terminado su plato –. ¿Alguna idea para la canción?

– “¡Y yo que pensé que ibas a decirme que tú tenías una idea!”, Pensó Ryo, vaciando de un sorbo su vaso de cerveza.

– Veo que no – Se respondió a sí mismo el menor de ambos, estirando sus brazos hacia arriba –. ¿Crees que un vaso de cerveza me aclarará las ideas aunque sea un poco? – Preguntó, sacándole a Ryo de las manos el vaso y llenándolo con cerveza para beber un sorbo –. Mhh… Rico – Se relamió los labios, siendo aquel acto observado por Ryo, quien desvió la vista.

– “La abstinencia sexual me tiene mal, eso está más que claro”, se sonrió.

– ¿En qué piensas?

– Que deberíamos ponerle un título a la canción.

– Ah, lo tengo. ¿No te lo dije?

Ryo lo miró con los ojos abiertos.

– “Matarte sería una buena solución, ¿sabes?”

– Torn.

– Torn?

– Sí. Nuestras iniciales – Respondió el muchacho, sonriente, volviendo sus sentidos al vaso que tenía entre sus manos pero, del mismo modo en que su vaso le fue arrebatado de sus manos, le hizo lo mismo a Tadayoshi.

– ¿Y qué más tienes pensado? ¿Que sea una balada romántica? – Bromeó el morocho.

– Lo pensé, lo pensé – Reconoció el aludido, afirmando sus palabras también con un movimiento de cabeza –. Pero no creo que algo romántico sea algo que nos… pegue a nosotros... ¿Me entiendes?

– Sí, lo entiendo – Le entregó el vaso, sin mirarlo –. Vamos a mi casa y pensemos algo allí.

– ¿En serio? Vaya… Seré afortunado. Conoceré el departamento de Ryo-chan – Susurró, sobre su oído, apoyando su mano sobre su hombro izquierdo. El aludido pudo divisar una sonrisa dibujando el rostro del menor, pero como Tadayoshi le dio la espalda rápidamente, lo adjudicó a su imaginación, y a la bebida.

Pidieron un taxi que los llevó al centro de la ciudad, deteniéndose frente a un edificio común como los que los rodeaba. Bajaron del vehículo en silencio, y del mismo modo entraron al edificio y abordaron el ascensor hasta el onceavo piso. Cuando las puertas se abrieron, se encontraron con la dulce sonrisa de una anciana.

– Buenas noches – Los saludó la mujer.

– Buenas noches – La saludó Tadayoshi, dedicándole una reverencia, acto imitado por Ryo, a los pocos segundos.

– ¿Vienen de una noche de rondas? – Bromeó la mujer, generando la sorpresa en Tadayoshi quien miró a su compañero después de oír la segunda pregunta de la anciana –. ¿O tuvieron que ensayar una nueva canción?

– Esta señora es fanática… nuestra – Dijo Ryo, respondiendo la pregunta que aún no había sido formulada por Tadayoshi.

– Ah… Ya veo.

– Recuerda darme una entrada cuando tengan un nuevo concierto – Pidió la mujer, abordando el ascensor.

– ¿Va a casa de su hija? – Preguntó Ryo.

– Sí, deben estar esperándome abajo. Buenas noches. Cuídense.

Los muchachos le dedicaron una reverencia, despidiéndose de ella de ese modo. Volvió el silencio, al entrar al departamento de Ryo. Automáticamente, Tadayoshi se dirigió a los ventanales, perdiéndose en el paisaje de la noche de Tokio.

– Guau… Qué hermoso paisaje.

– ¿Sí? – Preguntó el dueño del lugar, tirándose sobre el sillón –. Dos meses después de que empiezas a vivir aquí, ya es algo normal.

– ¿Tendré que vivir aquí dos meses entonces? – Replicó su compañero, apoyando su cuerpo contra la pared, sonriendo.

– Ten cuidado, los vidrios de esa ventana están flojos – Tadayoshi se separó de la ventana lentamente, mirando si efectivamente, los vidrios estaban por salir de su lugar. Oyó la risa de Ryo y, al mirarlo, vio su silueta dirigirse a una habitación contigua –. Idiota – Al regresar al living, lo hizo con dos botellas de cerveza, una en cada mano y le extendió una a Tadayoshi –. ¿Y bien? ¿Qué más tienes en mente? Al menos, ya sabemos que el título será “torn”.

– Mhh…

Tadayoshi se sentó en el único sillón de un cuerpo que estaba en el lugar, mientras que Ryo, se sentó sobre el de tres cuerpos. Ambos abrieron las cervezas y ambos siguieron bebiendo, sin ideas claras acerca de cómo seguir su reciente canción.

– Chigireru… Wareru – Susurró Ryo, bajo la mirada del menor –... Zutazuta? –Miró a su compañero con una sonrisa, ocasionado, la última palabra, que el aludido casi se ahogara con la cerveza.

– Estúpido…

– Al menos tiro un par de palabras, baby…

– Baby – Repitió Tadayoshi, dejando la cerveza sobre la pequeña mesa entre ambos y apoyando apenas sus zapatos sobre el borde de la misma.

– Bueno, si no sacamos nada… No será culpa nuestra…

– Not…

– Not, what?

Tadayoshi negó con la cabeza, pensando en algo.

– ¿Tienes papel y lápiz? Creo que todo lo que digamos, deberíamos anotarlo.

– Anotar, ¿qué? Con un “baby” no haremos nada – Se quejó Ryo, levantándose para ir a la cómoda detrás del sillón, de cuyos estantes sacó lo pedido por su compañero, entregándoselo luego.

– Don’t… blame – Dijo Tadayoshi, escribiendo.

– …Yourself, baby…

– Babe…

– Es lo mismo – Refunfuñó el mayor, intentando beber de la botella que había quedado vacía –. Voy por otra, ¿quieres? – Recibió por respuesta, un efusivo movimiento afirmativo de cabeza por parte del menor. Al regresar, le entregó su botella y se sentó sobre el apoyabrazos del sillón de un cuerpo –. Vaya… Has escrito bastante – Dijo, quitándole la tapa a la botella para beber un sorbo –. ¿Puedo leer?

– Léelo.

– Don’t blame yourself, babe. Don’t cry out anymore. Hakanaku chiru hana wa vanilla

Mamorenai jounetsu kuu wo kiru kanjou. Sweet pain heart beat. Break me down – Silbó, terminando de leer –. Eso sí que pega conmigo.

– Gracias – Dijo Tadayoshi, apoyando su espalda contra el respaldo del sillón y entrelazando sus dedos detrás de su nuca –. Deberías escribir algo tú también.

– No, yo diré palabras al azar y tú escribirás.

– Flojo…

– ¿Pensaste en mí mientras la escribías? – Preguntó Ryo, girando su cabeza para mirarlo.

– ¿Qué? – Repreguntó su compañero, frunciendo el ceño –. Por supuesto que no –. Ryo sonrió, estirando su cuerpo para dejar su botella sobre la mesa y se giró hacia Tadayoshi, acercándose considerablemente a él –. Ry… Ryo-chan…

– Shh – Susurró, apoyando dos de sus dedos sobre los labios del menor –. “Hitotsu mata hitotsu mukidashi ni naru kimi” – Cantó, con una melodía desconocida. La mano que estaba posada sobre los labios del menor, bajó lentamente hasta la altura de su corazón, junto con su mirada –. “Kokoro konna nimo ai ni kizutsuki obieteta nante…” – Susurró, antes de levantar su vista. Tadayoshi miraba estático la mano de Ryo apenas apoyada sobre su pecho. Oyó la usual carcajada de su compañero, pero al levantar la vista, halló sus ojos cerrados y sus labios siendo besados por los del mayor. Seguía inmóvil, mientras, todo lo contrario a él, Ryo estaba por demás inquieto. Sin soltar el agarre que se afianzaba cada vez más sobre los labios de su  compañero, se incorporó para pararse frente a él y acariciar su nuca, sintiendo su aliento bastante descontrolado, al haber sido tomado por sorpresa.

– Ryo-chan… Detente… Mhh… Ryo-chan – Jadeó Tadayoshi en medio de aquellos besos que parecían no tener fin. Lejos de detenerse, su oyente abrió sus piernas con la propia, apoyando su rodilla sobre el sillón para poder acercarse más a él. Sostuvo con fuerza su nuca, jalando sus cabellos para hacerlo abrir los labios y hurgar con su lengua dentro de la misma. Ryo se estremeció al sentir el débil contacto de Tadayoshi, quizás, intentando hacer una distancia entre ambos, pero, al mismo tiempo, sin poder ser capaz de hacerlo.

– Me dices que me detenga – Gimió el aludido, sobre el oído del menor, mientras sus manos desprendían uno a uno los botones de su camisa –… Pero mira cómo te pusiste por un simple beso y unas cuantas caricias – Ryo se incorporó apenas, para ver el agitado cuerpo de su compañero de grupo, sus mejillas rojas y un brillo cristalino sobre sus ojos. Se mordió el labio antes de volver a acaparar sus labios con pasión, gimiendo entre ellos.

– ¿Y tú…? – Jadeó Tadayoshi, bajando una de sus manos para tocar la erección de Ryo, haciéndolo sonreír.

– ¿Quieres encargarte de este gran problema?

– ¿Grande? – Tadayoshi lo miró, frunciendo el ceño –. No me digas que te operaste y lo mantuviste en secreto todo este tiempo, Ryo-chan.

– Compruébalo por ti mismo…

Ryo dejó sus piernas a ambos lados de Tadayoshi y sostuvo su cuerpo agarrando a los apoyabrazos del sillón. El menor despojó al morocho de sus prendas y acarició la longitud de su virilidad, sintiendo cómo el cuerpo de Ryo se estremeció, aferrándose sus manos al sillón. Su mano libre se dedicó a deshacerse de la remera del mayor para poder besar y marcar su piel. Sentía que con oír cada gemido por parte de Ryo, su cuerpo se estremecía.

– ¿En qué momento… te volviste tan excitante…? – Jadeó sobre su oído, usando su dedo pulgar para apretar su glande, ocasionando que Ryo se tensionara, mordiéndose el labio inferior para no gritar.

– Eres… un idiota – Gimió el aludido, con la respiración entrecortada.

– Tú me hiciste lo mismo – Besó su cuello sonoramente, sin detener sus acciones sobre su erección –. Ryo-chan…

– ¿Mhh?

– Creo que tienes razón… La siento más grande…

El mayor sonrió de lado, bajando su mano derecha para imitar las acciones que Tadayoshi llevaba a cabo sobre su hombría, sobre la del menor.

Conforme el tiempo pasaba, los gemidos de Ryo se hacían cada vez más sonoros, al igual que los de Tadayoshi.

– Ahh… No aguanto más – Se quejó Ryo, levantándose del sillón y lanzando al suelo todo lo que estaba sobre la mesa ratona. Su compañero lo miró, su figura estaba sensualmente apoyada sobre aquella pequeña mesa, y sus ojos inyectados de lujuria lo miraban fijamente a él. Se dio cuenta que esa noche iba a ser muy larga al sentir que su erección ardía dentro de sus pantalones, cuando Ryo se relamió los labios y se mordió el inferior, curvando sus labios en una sonrisa burlona –. Penétrame – Gimió, jugando con sus dedos sobre su entrada.

– ¿Qué? ¿Acaso Nishikido Ryo me está suplicando? –Preguntó burlonamente Tadayoshi, quedándose completamente desnudo bajo la mirada de Ryo. Acarició su columna vertebral, viendo cómo su piel se erizaba ante el contacto y su cuerpo se elevaba para permitir que su mano masturbara su hombría. Agarró sus caderas con ambas manos y apoyó su virilidad sobre la entrada de Ryo, oyéndolo gemir –. Me siento una persona afortunada… esta noche – Lentamente, con dificultad, Tadayoshi se adentró poco a poco en el interior de Ryo –… por estar a punto de tener sexo con Nishikido Ryo…

Apoyó todo su cuerpo sobre el del mayor, moviéndose en su interior con parsimonia mientras sus manos jugaban con sus tetillas. Ryo sentía su garganta seca, llegando a un punto que le dolía el simple hecho de tragar saliva.

– Ah… Ohkura… m… más… Mhhh… Más – Gimió el mayor. El aludido, haciendo caso al pedido de Ryo, se incorporó y sostuvo con fuerza sus caderas, embistiéndolo con fuerza. Del mismo modo en que sus uñas estaban prácticamente clavadas sobre la carne del mayor, las manos de Ryo lo estaban de la mesa ratona, lanzando gritos de placer cada vez que su punto más sensible era duramente golpeado por el menor –. T… Tócame…

– ¿No puedes… ah… hacerlo tú mismo?  – Se sonrió el menor, siendo ahora su propia mano la que masturbaba la hombría de Ryo.

– No puedo si… me la metes tan al fondo y… ah… me dejas la mente en blanco…

– ¿Siempre eres tan sincero… cuando tienes sexo con alguien…?

– Nunca lo pensé… Sólo… me dejo llevar por el momento – Giró su cabeza lo más que pudo y le guiñó el ojo –. Tadayoshi rió, dedicándole una rápida mirada al suelo, saliendo luego del interior del cuerpo del mayor – ¿Q… Qué haces…? – De un tirón, el aludido levantó el cuerpo de Ryo y lo acostó boca arriba sobre de la mesa, levantando y dejando su pierna derecha sobre su hombro, mientras que la izquierda quedó alrededor de su cintura. Esa segunda vez, su erección entró sin problemas dentro de Ryo, gimiendo el mayor de placer al sentir la longitud de la hombría de su compañero, entrar y salir de su interior, volviéndolo literalmente loco –. M… Maldito – Jadeó, recibiendo por respuesta una sonrisa sensualmente mordaz por parte del menor –. Así… voy a descargarme… en cualquier momento…  

Tadayoshi volvió a acercarse a su cuerpo para besar sus labios apasionadamente, mordiéndolos de a ratos, succionándolos, hasta quedar saciado al menos hasta sentir la falta de tener que hacer de nuevo esas mismas acciones sobre ellos.

– Tus labios… todo tu cuerpo… Es tan adictivo – Jadeó sobre su oído, mordiendo luego el lóbulo de su oreja, sintiendo las uñas del mayor arañando su espalda, estremeciéndolo por eso.

– Tú tampoco… vas a aguantar… mh… mucho más – Advirtió Ryo.

– He aguantado… demasiado…

– Creo que… tengo la parte final de la coreografía…

– ¿Ahora?

– La pensé cuando… me penetraste…

– Sí que eres raro – Jadeó el menor, besando su sudada frente –. ¿Y… cómo sería?

– Me gustaría… Ah… sentir tu erección detrás mío… y tus manos sobre mi entrepierna… Mhhh… De sólo imaginármelo… todo mi cuerpo se tensa…

– Ah… No hagas eso – Pidió Tadayoshi, sintiendo cómo el interior de Ryo se volvía más estrecho.

– ¿Por qué…? ¿Lo más difícil… y prohibido no te excita… todavía más…? Sí… Lo siento – Ryo hizo su cabeza hacia atrás, mordiéndose el labio inferior –… Creo que hasta puedo sentir tus venas… hinchándose… Ahhh…

– Exa… gerado – Sonrió Tadayoshi, aumentando el ritmo de sus estocadas hasta terminar descargándose, tiritando como una fina hoja de papel. Sin salir de su interior, se desplomó sobre el cuerpo del mayor y giró su cabeza para mirarlo –. No se romperá la mesa…, ¿verdad?

– No lo… sé – Respondió, con la respiración agitada, tragando saliva luego –... Es la primera vez que… alguien me tiene de pasivo sobre ella…

Tadayoshi sonrió, besando las facciones de su rostro mientras su mano siguió masturbando a Ryo hasta que este se descargó.

– Eres tan… lindo… Todo rojo…

– A ti te quedaría bien…

– ¿Sigues pensando en la canción…?

– Bueno, ahora que tuve sexo… creo que tengo la mente un poco más clara para seguir pensando en ella – Dijo, sonriéndole.

– ¿Después de que te dejé la mente en blanco?

– Eso fue una etapa de iluminación, Ohkura.

– ¿Quieres decir que después del sexo eres… más creativo…? – Agregó Tadayoshi, después de hacer una graciosa seña con la mano.

– Algo así – Respondió Ryo, entrelazando sus manos a su cintura –. Pero… Si no hubieras sido tú… no hubiera tenido el mismo efecto… Estoy seguro…

– ¿Eso quiere decir que vas a venir a buscarme cada vez que quieras creatividad?

– Estás preguntando demasiado, ¿sabes? Ahora que lo pienso – Se acercó a su oído, hablando sobre él en voz muy baja –… últimamente estoy muy carente de creatividad…

– Definitivamente… Tú no te vestirás de negro – Dedujo Tadayoshi, cambiando de tema.

– Idiota – Lo insultó Ryo, sonriendo –. De hecho… Realmente pensé en vestirme de negro…

– Una flor roja en el bolsillo del saco – Pidió el menor, acariciando el pecho de Ryo a la altura de donde se supone estaría el supuesto bolsillo –… Y un cinturón rojo – Prosiguió, acariciando la cintura de Ryo.

– Y un beso apasionado antes de la presentación – Pidió el mayor, besando apasionadamente a su compañero.

– Creo que a las fanáticas va a gustarle nuestra canción…

– Ah, ah, ah, ah, ah, ah… Ah, ah, ah, ah, ah, ah – Cantó Ryo, con una melodía hasta pocos días más tarde, desconocida para ambos. 

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Notas:
- Si mi diccionario no está mal xD Las palabras que dice Ryo en japonés: chigireru, wareru y zutazuta son distintas formas de decir torn en japonés :P